Alzheimer
Cuando recordar no pueda, ¿dónde mi recuerdo irá? Una cosa es el recuerdo y otra cosa recordar.”
Antonio Machado
La enfermedad de Alzheimer es una enfermedad neurodegenerativa caracterizada por una pérdida progresiva de memoria y ciertas funciones intelectuales que repercuten en el normal funcionamiento de la actividad diaria.
Aunque los problemas de memoria son el síntoma más visible, para confirmar el diagnóstico, deben ir acompañados por otros síntomas como: trastornos del lenguaje (afasia), dificultad para realizar ciertas acciones (apraxia), pérdida de reconocimiento de objetos o personas (agnosia) o la pérdida de funciones ejecutivas, es decir, la capacidad de adaptar el comportamiento.
Las investigaciones avanzan, pero aún queda mucho por conocer de los mecanismos que la desencadenan.
La Confederación Española de Alzheimer (CEAFA) nos dice que en estos momentos existen en nuestro país entre de 1,2 y 1,5 millones de personas que la padecen, aunque una buena parte de ellas aún no han sido diagnosticadas, por ello, vamos a relacionar algunos de los signos, además de la pérdida de memoria, que podrían alertarnos:
- Cambios en el comportamiento y / o personalidad.
- Pérdida de objetos.
- Olvido de acontecimientos recientes.
- Pérdida de orientación en espacio y tiempo.
- Trastornos del lenguaje.
- Dificultad para realizar tareas cotidianas.
- Dificultades en el razonamiento abstracto.
- La alteración del juicio.
- Pérdida de motivación…
Si detectamos en alguna persona de nuestro entorno alguno o varios de estos signos podría haber llegado el momento de prestar más atención para ver si nos encontramos ante un problema serio.
El Alzheimer está relacionado directamente con la edad, aunque existe alrededor de un diez por ciento llamados “enfermos jóvenes” menores de 65 años.
Se sigue investigando pero, en la actualidad, no existe tratamiento farmacológico eficaz para esta enfermedad, por ello, los esfuerzos han de concentrarse en la prevención y la atención. Con respecto a la prevención las últimas investigaciones indican que, a nivel mundial, aproximadamente una tercera parte podría prevenirse controlando: la diabetes, la hipertensión arterial, la obesidad, el tabaquismo, el sedentarismo, la depresión, la inactividad cognitiva, la hipoacusia y el aislamiento social. En esa línea están trabajando fundaciones como la “Pascual Maragall” cuyo lema es: Cuando te cuidas, el Alzheimer da un paso atrás.
Una vez ha sido diagnosticada la enfermedad, existen enfoques que proponen la utilización de actividades y terapias como: la danza, la música, la terapia con mascotas, la rehabilitación cognitiva, la terapia de recuerdo, terapia de luz, Snoezelen (estimulación multisensorial), etc… cuya eficacia, aunque aún no se ha podido medir científicamente, puede verse a simple vista por sus resultados a corto plazo.
Mientras la ciencia sigue avanzando hasta dar con una cura, la atención, el acompañamiento y el cuidado recae, la mayor parte de las veces en los familiares más cercanos y especialmente en las mujeres que son las que soportan tan pesada carga.
Nuestro sincero homenaje a esas heroínas y esos héroes anónimos.
Cuando te cuidas, el Alzheimer da un paso atrás.
Fundación Pascual Maragall
Ángeles Muñoz
Psicóloga